Especialistas del sitio AnandTech descubrieron que se optimizó el Galaxy S4 para que entregara los mejores resultados en distintas herramientas de benchmarking, mientras que el desempeño cotidiano del smartphone en realidad es menor.
Al cargar aplicaciones de benchmarking, como AnTuTu, Benchmark Pi, o Quadrant, la tarjeta de gráficos del Galaxy S4 corrió a 533 MHz, cuando habitualmente nunca supera los 480 MHz.
Un caso similar sucede con el procesador, pues al cargar el benchmark tanto el procesador Exynos 5 Octa como el Qualcomm Snapdragon automáticamente aumentaron al máximo la frecuencia de sus 4 núcleos. Pero cabe remarcar que este desempeño del CPU sí lo alcanzan otras aplicaciones, al contrario de lo que sucede con el GPU.
A pesar de que estas aplicaciones no son de mucha importancia para los usuarios comunes, estos resultados ponen en duda la fiabilidad de las especificaciones de los dispositivos de Samsung, por lo que se espera un comunicado por parte de la empresa para aclarar el resultado de las pruebas efectuadas por el equipo de AnandTech.
Deja tu comentario